La inteligencia es la capacidad mental que abarca el razonamiento deductivo, la planificación, la resolución de problemas, el pensamiento abstracto, la comprensión de ideas complejas, el aprendizaje rápido y el aprendizaje a partir de la experiencia. Dado que se considera que la inteligencia general es una característica de la persona relativamente estable, se pueden hacer pronósticos a largo plazo sobre su evolución. La importancia de la medición de la inteligencia recae en que se relaciona con los logros académicos y profesionales, así como con la calidad de vida y la salud.
La IDS-2 evalúa la inteligencia basándose en la teoría de la inteligencia mas amplia y empíricamente respaldada hasta la fecha: la teoría Cattell-Horn-Carroll. Ofrece tres medidas de inteligencia: una versión reduida o screening (2 pruebas), una versión estándar (7 pruebas) o una versión ampliada (14 pruebas).
Las pruebas incluyen tareas cognitivas típicas como tachar animales (tarea de cancelación), repetir series de números y de letras, recordar formas y posiciones y nombrar categorías.
Las funciones ejecutivas son procesos de autorregulación y control que permiten orientar la acción a objetivos y situaciones. Los tres mecanismos básicos son la inhibición, la memoria de trabajo y la flexibilidad cognitiva, cuyo desarrollo va más allá de la primera infancia llagando a la edad adulta.
En la etapa preescolar, las funciones ejecutivas están relacionadas con la adquisición del lenguaje, la inteligencia fluida, la capacidad de coordinación motora y la capacidad de autorregulación, capacidades esenciales para el aprendizaje.
Las pruebas de la IDS-2 incluyen tanto tareas sencillas (por ejemplo enumerar palabras), así como tareas más complejas, tanto verbales como no verbales.
En la IDS-2 se evalúa la coordinación general, la motricidad gruesa y fina y la coordinación mano-ojo.
La psicomotricidad desempeña un papel crucial en el desarrollo saludable de la infancia. La motricidad gruesa, la motricidad fina y la coordinación óculo-manual suelen estar vinculadas a las funciones cognitivas. Además, las alteraciones de la coordinación pueden conducir a una inhibición del desarrollo de las capacidades físicas y sociales. La psicomotricidad suele mostrar una relación con la autoestima, la ansiedad y los problemas somáticos.
Las pruebas de la IDS-2 incluyen tareas motoras típicas como el equilibrio y el trabajo con cuentas pequeñas.
Las competencias socioemocionales incluyen dos constructos: la competencia social y la emocional. La primera describe la disponibilidad y la aplicación de comportamientos cognitivos, emocionales y motores que pueden conducir a una relación interpersonal favorable a largo plazo. La competencia emocional describe la capacidad de ser consciente de los propios sentimientos, de expresarlos y de controlarlos de forma independiente. La identificación y comprensión de las emociones de otras personas también se describe como competencia emocional.
Las competencias socioemocionales están estrechamente relacionadas con el comportamiento social, el bienestar, la salud física y el rendimiento académico, pero también están relacionadas con la delincuencia, el abuso de drogas y las psicopatologías en la infancia. Además, las competencias lingüísticas pueden ser una variable causal crítica del desarrollo socioemocional ya que la comunicación de sentimientos y pensamientos es un componente clave.
Las pruebas de la IDS-2 incluyen tareas que implican ver fotos y escuchar historias, de modo que se puede medir el reconocimiento facial de las emociones y las reacciones emocionales.
«Las habilidades lingüísticas incluyen la comprensión de lo que otros dicen o escriben (comprensión del habla) y el propio habla o escritura (producción del habla). La adquisición de habilidades lingüísticas representa una de las tareas de desarrollo más vitales en la primera infancia. Las habilidades lingüísticas están relacionadas con el desarrollo cognitivo y psicosocial, así como con las habilidades socioemocionales.
La lectura y la escritura se aprenden durante la adquisición del lenguaje escrito. La lectura abarca tanto la capacidad como la comprensión lectora, y la escritura incluye los procesos de segmentación de un estímulo fonético en unidades fonológicas que luego se asignan a la respectiva representación gráfica. Por otro lado, la adquisición del lenguaje escrito constituye la base de una carrera escolar y profesional exitosa, y está relacionada con la salud y la longevidad.
El razonamiento lógico-matemático siempre ha estado vinculado a representaciones concretas que se activan en función del problema. Las competencias lógico-matemáticas durante el último año de Infantil pueden predecir el rendimiento matemático al final del primer y segundo año de Primaria. Además, se ha demostrado que las competencias lógico-matemáticas influyen en las oportunidades educativas y profesionales de una persona.
Las pruebas de la IDS-2 incluyen tareas fonológicas, del habla, la lectura, la ortografía y una serie de cálculos matemáticos.»
Para medir la motivación y la actitud, la IDS-2 evalúa la responsabilidad y la motivación de logro de los niños y adolescentes de 11 a 20 años. La responsabilidad está relacionada con la precisión, la decisión, la fuerza de voluntad y la determinación, y es una de las características de personalidad más importantes en relación con el éxito académico y profesional. Presenta correlaciones positivas con el desarrollo de la identidad, la satisfacción en las relaciones y la longevidad, así como correlaciones negativas con la conducta disruptiva.
Las acciones originadas por la motivacion de logro se producen cuando existe el mayor incentivo para la búsqueda del éxito. Este incentivo puede ser tanto intrínseco, referido a los propios estándares personales, como extrínseco, basado en la comparación con los compañeros. La motivación presenta correlaciones positivas con el éxito escolar, académico y profesional y, además, a veces puede ayudar a explicar las variaciones en la inteligencia.
Estos aspectos se miden mediante una serie de afirmaciones que se califican en una escala de respuesta de cuatro niveles.
La IDS-2 es una herramienta integral diseñada para identificar los puntos fuertes y las áreas críticas en el desarrollo del niño. Es la herramienta de evaluación más completa disponible en la actualidad.
Más información sobre la aplicación, puntuación y uso de la IDS-2.
Todos los profesionales que trabajen en las distintas versiones de la IDS-2 pueden acceder a una base de datos global para que puedan investigar sobre el desarrollo psicológico de los niños y adolescentes.